Indio Solari: “Viví un duelo con el final de la banda”

Pasado, presente y futuro.

 

El eterno líder de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota habló largo y tendido, en una entrevista que duró una hora veinte en Luzbola, su centro de operaciones en Parque Leloir. 

El Indio, entrevistado por Andy Kusnetzoff, arrancó mostrando fragilidad con respecto a su padecimiento, el Mal de Parkinson: “Esta no es una buena mañana, pero me estoy acostumbrando porque es una enfermedad que te obliga a aprender a vivir de nuevo. Cuando no tengo asistencia, tardo cuarenta minutos en ponerme un suéter”

Las frases más destacadas de la nota: 

“Tengo computadora, 23 mil elementos en los discos rígidos, tengo canciones para la cuarta generación de Solaris del futuro, porque amo lo que hago”.

“Lo último que hago son las letras, lo primero es la textura, me interesan las texturas que trae lo digital. Cuando me hablan de la calidad del analógico… la guitarra te da el acorde, en el mejor de los casos, pero también desafina”.

“La felicidad sería hoy no tener esta enfermedad que no me permite subirme a un escenario. Para mí el escenario es el lugar más cómodo que he tenido en mi vida”.

“Puede existir un streaming desde el estudio” en relación a un encuentro en vivo, cara a cara con su público.

“No quiero respetar ninguna tradición, no quiero ser cultor de nada, lo lamento por aquellos que creían que uno podía ser Redondito toda su vida. Redondo es el público, no los que estamos sobre el escenario”.

“No todos te quieren por lo mismo, unos te quieren por una idea que dijiste en algún momento, otros porque el hermano le llenó la cabeza, no hay una característica”.

“La gente propone que son crípticas las letras mías, porque quieren entender. Pero el entendimiento no es lo que se precisa, yo escribo para que imagines, no para contarte lo que pasó con la piba del Blockbuster”.

“Mi padre nunca me dio un abrazo, mi viejo era el hombre de piedra, pero porque no le nacía abrazar, creo que era frecuente en la generación esa, y la mía fue una generación de choque, y quizás era molesto. Eso del cariño era el rol de la madre, mi vieja tenía que dar la cara por mí hasta en la primaria, porque ahí ya me hacía la rata”.

“Yo no tengo miedos, no tengo miedo a la muerte, cuando tengas 76 años tampoco vos vas a tener miedo a la muerte. Solo la pienso en términos poéticos”.

“Nunca pensé en dedicarme a la política, demasiado hago con mis canciones”.

“Viví un duelo con el final de Los Redondos porque era mi banda, y a Skay se le ocurre decir en un reportaje que todo esto (el fin del grupo) se debía a que uno de nosotros se había querido quedar con la gloria de la banda. Semilla no fue, soy yo”

“En su momento hicimos cosas… canciones muy lindas, hicimos una mitología buena. Pero ahora me encontré con unos socios estupendos para hacer música, esta banda es estupenda”.

Empezar

Give us a call or fill in the form below and we will contact you. We endeavor to answer all inquiries within 24 hours on business days.