Michoacán es uno de los estados más hermosos de México. Con una riqueza que va de lo cultural a lo natural. Contando con relieves como la Sierra Madre del Sur, y costas que conectan con el Pacífico, sus lagos Pátzcuaro y Zirahuén, sus extensos bosques y claro; sin olvidar que también cuenta con uno de los santuarios más importantes de la mariposa monarca, especie tan hermosa e importante para la biodiversidad del ecosistema regional y continental. Además, a nivel cultural tiene una conexión con etnias tradicionales y milenarias como los purépechas, quienes habitan estas tierras desde hace siglos y la conocen mejor que nadie. Siendo oriundo y heredero de un estado como este, Walter Esaú expresa a través de su música su identidad, su cultura y la conexión que tiene con sus raíces, su tierra.
Partiendo de referentes clásicos como Jhonny Cash y Bob Dylan así como de la música latina, con influencias de las baladas de José José y Sandro, el bolero de Agustín Lara y por supuesto, Juan Gabriel, con la intensidad de sus canciones, su emotividad y sus arreglos instrumentales, es lo que ha inspirado a Walter a crear su propio estilo, ligando sus letras con lo que siente, con lo que vive y con su cultura.
Antes de usar su nombre verdadero, Walter Esaú usaba el seudónimo Negrø por un momento que atravesaba en su vida, sin embargo, en su evolución personal y considerando la posibilidad de que se prestara a una connotación negativa, decidió continuar su proyecto a través de su nombre real.
Su último disco, El Cantante, es su entrega más reciente. Con letras que dicen “Soy un país sin norte/ sin fronteras ni nombre/ Esperando a que vengas a habitarme y gobiernes tú”, en ‘Jardín sin Flores’, o “Sé que vine al mundo destinado a perder/ Pero un buen día a todo eso yo me rebelé/ No me falta nada y con eso ya gané/ No es que tenga mucho, pero es tuyo también”, en ‘Hoy sé’. A través de sus letras, con una poesía que no cae en lo obvio y usando elementos metafóricos, habla de temas sensibles, desde la frustración por no poder ver a sus familiares que están “del otro lado”, en Estados Unidos (por las restricciones legales que impone contra los mexicanos dicho país), o lo complicado que es salir adelante en los contextos contemporáneos.
Rompiendo con un esquema que se repite cada vez más en el regional mexicano —donde el éxito, el reconocimiento, el poder y el dinero suelen idealizarse por encima de todo—, Walter plantea una mirada distinta. En un entorno donde muchas veces se exalta lo material y el ego, pero se deja de lado la fragilidad de los sentimientos, el valor de la derrota y la experiencia de la tristeza, su propuesta, dirige la mirada hacia otro ángulo. Reconociendo lo que significa sentirse derrotado, sin perseguir el ideal de riqueza ni la ilusión de la fama, Walter toca tierra con temas cotidianos. Su último álbum busca conectar con lo que él observa y con lo que la gente vive, poniendo en el centro las emociones reales y las historias que muchas veces quedan fuera de la atención popular.
Su música no denuncia, pero sí expresa mucho lo que pasa en su tierra natal, la cual ha tenido una “mala racha” de violencia, impactado por eventos desafortunados. La depredación de los bosques; las sequías y el mal uso del agua que han desaparecido lagos enteros; la mala administración de un territorio tan rico y una visión llena de incertidumbre es lo que hace de este álbum tan profundo, lleno de nostalgia y sentimientos.
Empleando a músicos de orquesta, Walter creó en este disco una mezcla de sonidos que fácilmente se podría confundir con el corrido tumbado, y aunque rescate un poco de esos elementos rítmicos, no es el género en el que se podría catalogar su proyecto, el cual esencialmente es una combinación del folk, regional mexicano y boleros.
Actualmente, prepara una presentación que tendrá lugar en el Foro Indie Rocks, donde interpretará su último álbum con la orquesta que lo acompañó en su realización, por lo que promete ser un evento único por su nivel de producción. También acaba de lanzar el disco vinilo de su último álbum, el cual, ya se puede encontrar a la venta en la página uDiscover de Universal Music.
¿Cómo está el proyecto de Walter Esaú en la actualidad? ¿Cómo andas desarrollando tu proyecto?
Walter: Pues nada, ahorita el proyecto se encuentra… acabamos de sacar un disco en octubre, que salió de forma digital, pero, pues con la noticia que pudimos editar un vinilo, que es como, pues la gran alegría ahorita del proyecto, como algo a lo que nos aferramos un montón y se consiguió. Conseguimos que nos editaran un vinilo y pues ya lo tenemos por acá.
Me lo voy a conseguir, me encanta la estética que tiene el disco, El Cantante, ¿no? Ahora, ¿Cómo ha sido la evolución de Walter Esaú? Antes eras Negrø ¿Cómo has ido desarrollando esta transición de Negrø a Walter? Y también ¿Qué ha implicado para ti?
Walter: Pues… pareciera que evidentemente, pues soy el mismo y sigo tocando las mismas canciones, pero el nombre sí tiene como una fuerza ahí. Y aunque tenía un poco de miedo cómo iba a reaccionar la gente con el cambio de nombre, al final creo que me empoderó mucho usar mi nombre real y como quitarme, creo, que era como una mascarita que me ponía yo también para no usar mi nombre y al final se siente bien. Creo que fue una decisión acertada. Todavía, todo el tiempo me está llegando gente de que, oye, cantas como Negrø, o sea, me recuerdas a un proyecto que se llamaba Negrø… y pues claro, soy yo. Pero bien, la mayoría de la gente lo tomó bien y me gusta mucho, me da mucha tranquilidad poder usar mi nombre.
¿Cómo dirías que han evolucionado tus sonidos en tu etapa como artista? ¿Cómo han ido progresando? Porque tu último álbum, rescata mucho del regional mexicano.
Walter: Sí, pues el proyecto inició siendo folk, muy crudo, con influencias de Bob Dylan, de Johnny Cash y nada más, como yo y la guitarra, que fue una linda forma de empezar. Pero la misma curiosidad y la misma necesidad de ir, emmm… Pues sí, como explorando sonidos me llevó a cambiar un poco. El disco pasado, por ejemplo, era mucho la balada romántica de los setentas, artistas como Sandro, como José José, como que era esa influencia que tenía y como que me ha ido llevando nada más la música sola. La misma curiosidad me ha ido llevando a explorar, de que un proyecto mexicano y de que un proyecto michoacano y siempre con esa línea, manteniendo las letras, que me gusta hacer lo más honesto posible en las letras y nada, ahora con el disco que tenemos, con el cantante, está muy inspirado, sí, en el regional, pero muy inspirado en las bandas de vientos de Oaxaca, de toda esta orquestación de metales. Fue una cosa que hace unos años descubrí y que me daba mucha curiosidad de hacer algo así, aunque es difícil tenerlo en vivo, tener una orquesta siempre en vivo. No pensé mucho en eso y simplemente nos dejamos llevar y encajándolo un poco en el regional, dándole vuelta, no tocando los mismos instrumentos, hablando de otras cosas y haciendo una propuesta más que copiar un sonido.
Respecto al concepto, quiero ahondar más en los sentimientos que implicó hacer esta entrega ¿Cuál es el sentimiento que más predominó? Que digamos, cuando lo estabas haciendo, decías, este sentimiento lo tengo muy presente.
Walter: Para mí era muy importante hablar de… que creo que es una cosa de la que no se habla mucho en el regional, que es ser vulnerable, de permitirse hablar de que las cosas no siempre están chidas, de cambiar el discurso, de: empecé desde cero y ahora está ahí en las cimas. Como que es un discurso muy copiado, que ya ni siquiera le creo a toda la gente que lo cuenta, entonces también hablar de la derrota, de perder, de estar abajo, de sentirse mal y siempre, pues… del amor, del desamor, cosas muy cotidianas. Y de lo que vivo, de mis amigos, de sus historias, como que creo que el regional tiene música muy buena y tiene letras muy buenas, pero muchas veces también no hablan de cosas que vivimos toda la gente, gente del día a día; entonces, un poco intenté hablar de eso y siempre cuidando la parte de la letra que es como una cosa muy importante para mí.
Has mencionado que la nostalgia también es un sentimiento que te acompaña de cierta forma. Me gustaría preguntarte, ¿cuál es esa etapa de tu vida que…?, por ejemplo, añoras mucho y que dices, no sé, la tienes muy presente y que te ha marcado y ¿Cómo retomas ese sentimiento?
Walter: Pues pienso mucho en los tiempos en los que podíamos pasar más tiempo con los amigos; que luego la vida se encarga de que cada quien tenga que ir por su lado, a pesar de que justo en este momento de mi vida estoy muy amigado con la idea de crecer, me gusta, me gustan las cosas que he aprendido, me gustan las cosas que conozco. Siempre hay un dejo ahí de nostalgia de volver a esos días donde todo era bien sencillo, donde no había que pagar tantas cuentas, donde se trataba un poco más de divertirse y pasarlo bien. A veces despierto con esa nostalgia, pero también me gusta el momento que estoy viviendo y las decisiones que estoy tomando y hacia dónde va el proyecto.
Mencionabas sobre las letras que buscabas diferenciarte, como una propuesta más única. ¿Qué tipo de historias o de presencia o impacto para tus oyentes te gustaría que influyera? Digamos, a diferencia, por ejemplo, de los Corridos Tumbados que hay gente que dice, me siento empoderado, contigo, ¿Qué es lo que te gustaría transmitir?
Walter: Pues, a mí me gusta hablar de lo cotidiano, de cosas del día a día. Me gusta ver en cosas chiquitas algo grande, ¿no? O sea, me gusta hablar de un núcleo que tengo muy cercano, de mis amigos, de mi familia, de mis vecinos, de la vida que es… la que me tocó vivir a mí. Y ya si de pronto por allá alguien también se identifica y la afecta de una forma positiva también está bien chido, pero iba a ser muy difícil subirnos como al barco de que todo está bien y nos va bien verga porque no es cierto, o de que traigo, o sea, yo no tengo ni un coche, ¿no? Para empezar no tengo un coche, no pondría de que me suba al Lambo ¿no?, o sea, era como hablar de las cosas que conozco y sé que mi realidad es la realidad de un chingo de gente. Entonces, por ahí va a haber gente también que se identifique con las letras.
No te gustaría convertirte en una persona que sea abrumadoramente famosa. O que tenga un éxito en el que incluso te impida poder salir en la calle o pasear el parque sin que la gente o, paparazzis te estén bombardeando.
¿Por qué no te interesa tanto ese estilo de vida? ¿Por qué no te interesa adquirir este nivel de fama?
Walter: Me parece que es un precio bien caro por pagar, o sea, yo no sé, me parece que es como convertir toda tu realidad en una pequeña cárcel. Hay bandas que son superexitosas, o sea, yo veía, por ejemplo, una banda que se llama Bad Bad Not Good, que son tremendamente famosos, tocan en todos los festivales del mundo, pero pueden salir todavía a la calle y nadie los molesta. Si los ves caminando por aquí, mucha gente no los va a reconocer. Ese sería el sueño, ese sería justo el sueño. Mi sueño sería poder tocar en un montón de lados y vivir de mi música, pero no a ese grado donde ya no se me permita ser yo, ¿no? También siento que tiene que ver con la inmediatez de las redes sociales. No me gustaría hacerme famoso porque me pegó un TikTok y pudo hacerme tremendamente viral y luego, ajá, que se me encasille por una sola cosa. Entonces, no tengo ningún tema; si de pronto sucede, sucede y ya está. Pero el sueño, el ideal, en mi cabeza, es SÍ poder llegar muy lejos y todavía poder ir al súper sin que nadie me moleste.
Tocando sobre las letras, también la melodía. Por ejemplo: hay una canción que tiene una melodía muy interesante, creo que es Obertura. ¿Cómo fue el proceso de crear esas melodías también? ¿Qué profundidad llega? Hay tracks que no tienen letra, solamente son como pura música ¿Cómo haces esto?
Walter: Sí, hay dos tracks instrumentales que están a propósito también del vinilo, ¿no? El vinilo, el lado A y el lado B, cada uno inicia con un track instrumental. Entonces, fue la idea de la experiencia de sentarte a poner un vinilo que empiece con un intro, y cuando le das vuelta también empieza con un track instrumental. Y eso fue, pues también me ayudé de amigos y de mi banda, mi banda son músicos del Conservatorio, y juntos creamos ahí un… pues sí, como el intro, por ejemplo, es una cosa que nació de, o sea, el cantante tenía ese intro e iba a ser una canción gigantesca y mejor la partimos, y dijimos, bueno, podemos enfocarnos en hacer una intro de todo el álbum y que sea como algo lindo de tener, a hacer una canción de 10 minutos y que nadie la va a escuchar.
Ok, o sea, ¿entonces la intención El Cantante era hacer todo un solo track?
Walter: Ajá, sí, sí, sí, el intro y el cantante eran un solo track. Si tú lo escuchas, está exactamente en la misma tonalidad y tiene como la misma progresión de acordes, simplemente pues la partimos porque si no iba a ser una cosa gigantesca, pero sí está a propósito el track 1 así, y el de ondeado, digo, y perdón, y obertura, también está en el lado B, iniciando justo el lado B.
Tengo que conseguir ese disco, la verdad, ¿dónde lo puedo conseguir?
Walter: Va a estar en, se llama U-Discover, la tienda en línea de Universal, por ahí va a estar ya, me parece que ya, a partir de ahora ya está la venta.
¿Cuáles dirías que son tus tops 5 artistas que estás escuchando? Como, no sé, los estás escuchando, por ejemplo, hoy en la mañana, ayer, en la semana, como que estos 5 artistas te llaman mucho la atención, me interesa mucho también su propuesta.
Walter: Estoy ahorita casi escuchando pura música en vinil por estas cosas, bueno, también porque acabo de sacar un vinil, pero porque justo como, sí, pensando en esto de no aferrarme a lo digital. He estado comprando muchos viniles, y encontré un vinil de una banda que se llama Los Socios del Ritmo, que es como psicodelia mexicana, no tan a propósito, pero muy ligada también a la cumbia.
Estoy escuchando a Willy Colón, a Rubén Blades, estoy escuchando mucho ahorita a una banda mexicana que se llama Belafonte Sensacional, ¿y qué más he estado escuchando por ahí? Bueno, tengo una lista como dónde viene, no sé, ahí tengo a Rosalía, ahí tengo el, ¿cómo se llama el nuevo Nathy Peluso? Grasa, estoy escuchando mucho ese disco, que no lo tengo todavía en vinil, pero es un disco que me gustó mucho, y que lo estoy agarrando también como influencia para lo que viene. Entonces, como eso es lo que estoy escuchando más o menos ahorita.
Vi que vas a tener un concierto en Indie Rocks, ¿no?
Sí. En la Roma,
¿Estás planeando tocar dónde más?
Walter: Pues, ahorita toda la atención y toda la energía está en el Indie Rocks, que es el 10 de agosto, vamos a tocar el disco de principio a fin, o sea, desde el track número uno hasta la 12, y luego canciones también de todo mi repertorio. Viene toda la banda que grabó el vinilo, que somos ahí como 11, 12 músicos, y va a ser la única, o sea, estamos muy enfocados en esto, porque va a ser el único chance de escucharlo así, porque es muy cara la producción de un concierto así, viajar a muchos lados con tanta gente es difícil, pero estamos pensando que después de Ciudad de México, queremos hacer de ley Guadalajara, Tijuana, Monterrey, y siempre hacemos un show al año en Morelia, porque yo soy de Morelia y es donde mejor nos va también. Entonces hacemos nuestra posada anual en Morelia y la haremos otra vez este año.
Ahora que mencionas lo de Morelia, es una pregunta que me estaba surgiendo, ¿cómo ves Morelia ahorita? ¿Extrañas cómo era antes? ¿Cómo está ahora? ¿Cómo ves los cambios? ¿Hay evolución del propio estado’ y qué es lo que hace a sentir en ti?
Walter: Sí, extraño cómo era antes, Morelia en particular, porque la ciudad ha crecido muy rápido en los últimos 10 años, y es triste ver lo que se ha convertido, el clima cambia, ya no hay zonas verdes, es super caluroso, es muy extremo el clima por mucho tiempo. Entonces creo que tenía el clima perfecto y ahora se encargaron de arruinarlo. Y a nivel de la seguridad y cómo está el estado, también es difícil, es difícil ver cómo se está deteriorando el estado. Pero ahí entra como otro tema ¿No? Es la desatención, justo de las autoridades, que luego por ahí se quiere voltear la atención y llevarlo hacia la música, y me parece que eso es completamente absurdo, todo es una estructura social que está podrida y que tiene que ver con cosas de corrupción desde hace muchísimos, muchísimos años, que no se ha podido solucionar. Y sí, pareciera que no, pero cada vez se deteriora un poco más.
Justamente mencionas el deterioro climático, por ejemplo, en el 2024 hubo una sequía muy fuerte en Michoacán, y también tienes una canción que dices que hace falta lluvia, que hace falta que caiga un aguacero, ¿también podemos relacionar eso?
Walter: Sí, tuvimos meses donde pensamos que ya no iba a llover, hay lagos que desaparecieron, es una cosa loquísima que jamás pensé que iba a pasar, o que no iba a pasar tan pronto, pero sí, pensé que no me iba a tocar verlo a mí, desapareció uno de los lagos más importantes del estado, que por ahí medio están intentando rescatarlo, pero es como bueno, no sé si ya es demasiado tarde para hacerlo, entonces sí, justo también esa puede ser la nostalgia de la que hablo, también si eran tiempos mejores en ese sentido.
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